Escrito por Beservices

Publicado: (abril 2015)   |   Última modificación: (octubre 2022).

Ante la EVIDENTE evolución de las aplicaciones informáticas hacia soluciones CLOUD, las empresas tantean diferentes opciones y alternativas entre las  ofertas con las que diariamente son bombardeados generalmente por los propios fabricantes de ERP’s. Mientras, su entorno y sus competidores son cada día más virtuales, y  ya sea por iniciativa propia o forzado por los proveedores de software, en menos de dos años trabajarán en entornos cloud. En este contexto: ¿Qué sucede con los desarrolladores de programas y los distribuidores pequeños?

Los grandes fabricantes lo tienen muy claro: ofrecen directamente "una nueva versión", que como novedad, viene servida en formato cloud. Generalmente se trata de la misma versión ya existente en el mercado, pero adaptada para trabajar en este nuevo entorno. En ocasiones crean versiones "mejoradas" para trabajar vía WEB íntegramente. Los beneficios para ellos son evidentes: centralización de las aplicaciones de todos los clientes en un mismo entorno, reducción drástica de fallos derivados de los equipos del cliente, reducción de personal y desplazamientos para realizar actuaciones a domicilio, etc,... En la misma tónica, la solución incluye dos conceptos en uno: la venta de la aplicación y el alquiler del servicio CLOUD. De esta forma el fabricante toma el control de todos los elementos que afectan el buen funcionamiento de SU programa.

Todo lo demás queda excluido. Incluso el distribuidor local.

Las grandes empresas han hecho un giro importante y han cambiado las reglas del juego ya que, para garantizar el buen funcionamiento de SU ENTORNO, en la mayoría de los casos presentan la nueva solución con una condición clara: facturan ellos directamente y comisionan al distribuidor que ha realizado la venta. Vestido con un "ahora tendrás menos trabajo pero te comisionamos igual" el distribuidor ve, inicialmente, que podrá ofrecer a sus clientes lo que están buscando, pero al mismo tiempo pierde el control directo sobre ellos. ¿Cómo puede actuar el desarrollador de software o el pequeño distribuidor ante esto? El distribuidor de programas de grandes fabricantes se encuentra ante un panorama poco alentador:

  • Pierde el control directo sobre el cliente.

  • Se reducen sus ingresos y estos pasan a ser comisiones.

  • Reduce sus intervenciones directas, y consecuentemente la facturación.

  • Pierde contacto con el cliente ante nuevas necesidades de su ERP.

Para el desarrollador de programas propios, a la lista anterior se añaden:

  • Pérdida de competitividad respecto a "los grandes"

  • Costes añadidos a su propuesta si lo quiere ofrecer en cloud.

  • Desconocimiento técnico especializado.

  • Necesidad de subcontratar servicios y dependencia técnica.

  • Sobrecostes ocultos (licencias, exceso de tráfico, caídas de sistema, configuraciones nuevas…)

El revendedor de programas no tienen demasiadas opciones: se deberá ajustar a las exigencias del fabricante. El desarrollador de aplicaciones procurará adaptar u ofrecer soluciones "cloud", con más o menos acierto, pero siempre dependiendo de un proveedor especializado que le alquilará una serie de servicios, y que se limitará a dar soporte sobre los equipos que alquila. Inevitablemente, se precisará de soporte puntual que pagará aparte, o se verá obligado a contratar técnicos propios que encarecerán su producto.

¿Por qué beCloud es una solución sólida donde afianzar TU futuro como desarrollador o distribuidor?

Para contestar a esta pregunta, buscaremos primero lo que el desarrollador de software o revendedor desearía poder tener:

  • Disponer de un datacenter propio, donde poder testear y configurar cada escenario previo de los clientes en pruebas piloto, que no le supusieran coste alguno.

  • Tener un equipo de técnicos especializados en soluciones cloud computing que estudiaran cada caso y aplicaran cada solución.

  • Poder acceder a un plan de licenciamiento de pago por uso que le permita vender el servicio a medida, licencia a licencia, sin pre-adquirir paquetes.

  • Activar o cancelar servicios según demanda del cliente final.

  • No asumir costes hasta que el cliente no contrata el servicio y este se encuentra en producción.

  • Disponer de técnicos que atiendan en directo las necesidades del cliente final, tanto del entorno virtual como del entorno local, para evitar y atender directamente cualquier incidencia.

  • Poder migrar el entorno de red local A CLOUD SIN CAMBIAR NADA.

  • FACTURAR DIRECTAMENTE al cliente, como siempre.

  • Tener plena visibilidad de las incidencias del cliente Y DE SUS NECESIDADES, para atenderles en primera persona y seguir siendo su proveedor de VALOR AÑADIDO.

En esencia: esto es beCloud para desarrolladores y distribuidores de programas. Si quieres saber como ubicar tu aplicación o la de tus clientes en un entorno beCloud, con alta disponibilidad y en territorio nacional, contacta con nosotros. Haz tu piloto sin coste en nuestros sistemas y verás TU FUTURO muy claro.